sábado, junio 24, 2006

Sed


Espero el abrazo de la oscuridad y empiezo a andar en la noche buscando compañía. Tengo sed. Pero el deseo de compañía es más fuerte. Sigo buscando. Encuentro alguna; sonriente, amable, huele bien. Tengo más sed. No me convence, no me atrapa. Sigo buscando. Alguien me entretiene un rato. Siento sed todavía. Camino más lento para encontrar la compañía que busco. Tomo un colectivo, un subte, un taxi. No sé a dónde voy, sólo sigo buscando. La noche me acompaña hasta ahora. Busco una vez más y aparece alguien. Dejo de buscar. Sí, es compañía. Finalmente. Pero tengo sed, tanta sed. Muerdo. Bebo. Ya no tengo sed. Mi garganta ya no arde. Mi corazón, sí. El alma me quema. La noche me sigue acompañando hasta que sale el sol. Vos, ya no. Tengo sed.
2005

Este era mi estado de ánimo hace cerca de un año. Qué loco todo, no?

1 comentario:

Jorge dijo...

¿Sabes?, hace dos años años hice algo similar, escribí en un par de hojas mi estado de ánimo y sobre todo, los propósitos que tenía en mente para los años venideros.
Lo hice como si estuviera hablando con un "yo" un poco mayor.
El otro día las encontré y me sorprendí bastante al darme cuenta de que en realidad, no he crecido nada, sigo siendo el mismo.
Cambian los estados de ánimo, pero eso pasa todos lo días; el sustrato permanece año tras año, creo que esa es nuestra personalidad.
Un saludo, Jorge.

Google